La tarde no prometía mucho, éramos tres (aunque tres de los mejores cabe decir) los que quedábamos y no íbamos a hacer más que dar vueltas de aquí para allá por el barrio y gastar y gastar, que no sé que tienen los chinos pero aunque no tenga nada de hambre siempre me acabo comprando algo. P. para variar llegó 40 minutos tarde, pero es que si ya de por sí sale tarde de su casa que no se pare a hablar unos 15 minutos con unas amigas que ha visto hace escasos minutos. Pero bueno, ahí estábamos los tres: P., A., y yo. Y vino la inspiración y me acordé que desde el 20 de abril tenía caducado el carné joven y mis padres me habían dicho que ellos no me iban a llevar hasta Recoletos para renovármelo que ya tenía una edad como para apañármelas así que lo propuse y aunque pusieron muchas quejas a A. la soborné diciendo que si venía no me importaba que pasásemos a alguna tienda y P. pues no tuvo más remedio que venir. Así que subí a casa a por dinero y las gafas de sol, que por cierto A. se las ha quedado en su bolso, y pusimos marcha al metro que con la nueva linea no se tarda NADA.
Total que llegamos a Banco de España y no sé en que estaría pensando que nos recorrimos todo el Paseo del Prado hasta que ya caigo y digo ¡Ay va! que era para el otro lado. A P. le dio igual, pero a A... A. es la persona que más odia andar en esta vida, en hacer un trayecto que normalmente se tarda 5 minutos, nosotros tardamos 30 porque andamos dos minutos y descansamos 10 en un banco porque ya está cansada. Pero P. y yo tomamos la delantera y nos siguió. A A. y a mí nos llamó la atención que en la misma calle una acera estaba con los carteles de propaganda del PSOE y la otra del PP, que vamos, tienen unas pintitas... Aunque entre la foto de Espe de hace 4 años en la que parecía una Gremlin total o esta me quedo con esta. Y empezamos a hablar sobre lo patético que estaba siendo este año la campaña, que en vez de centrarse en lo que pueden mejorar se dedican a destrozar la campaña al otro, unos con el copago y la condesa Aguirre y los otros mezclando churras con merinas con los parados. Sencillamente patético, ya sólo por esto no se merecen ganar ninguno. Pero bueno, no sigo hablando de política que tras la última vez ya aprendí suficiente.
En la Plaza Cibeles nos dimos cuenta que el actual ayuntamiento estaba de puertas abiertas así que decidimos pasar y verlo. Subimos hasta las 6 planta para ir a un mirador o no sé que rollos, pero llegamos ahí y nos dicen que necesitábamos ticket y claro eso nos sonó a pagar así que pasamos. Tras perdernos buscando la salida, llegamos al hall y buscamos en uno de los iPads que están ahí por dónde se iba a renovar el carnet joven. Pusimos marcha y una vez llegamos me dicen que tenía que solicitarlo antes de ir aunque fuese una renovación, vamos que habíamos perdido el tiempo... Estuvimos dudando sobre a donde ir. Nos negamos a ir a Gran Vía puesto que lo único que hacemos es bajarla entera para llegar a Plaza de España y sentarnos. Así que dije pues por aquí como no queráis ir a Colón, al Retiro o al Prado poco haremos... Y P. dijo que quería ir al Prado por lo que yo encantado, pero A. dijo que nanai, pero una vez más P. y yo tomamos la delantera y no tuvo más remedio.
Antes de entrar nos apetecía sentarnos un rato a descansar y eso hicimos, nos fuimos a la salida que da con el jardín botánico y nos sentamos, descansamos una media hora y entramos al Prado, pero como sólo nos quedaban 20 minutos decidimos ver unos ocho cuadros, y así fue, perdidos por el Prado en busca de esos ocho cuadros en los cuales si tenía alguna anécdota y me la sabía la contaba o simplemente contaba el qué representaba y P. hizo lo propio con "Saturno". Una vez salimos A. y P. dijeron que les había parecido muy interesante cosa que me sorprendió muy gratamente. Nos sentamos otra vez y empezamos a hablar sobre varios temas, algunos no adecuados para escribir aquí y decidimos que ya era hora de volver a casita. Así que volvimos a Cibeles y cogimos el metro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario